jueves, 18 de diciembre de 2008

REALIDAD-ES

Hay cosas que solo son lo que parecen cuando no parecen lo que son. Cuando la realidad se empeña en jugar al escondite y además gana en experiencia a medida que más la buscamos, solemos darnos de bruces con una ingente cantidad de irrealidades que, a fuerza de formarlas, terminamos viendo como acercamientos a lo que buscábamos. Rara vez daremos con la tecla acertada, por lo que nos vemos obligados, como los viejos guitarristas, a elegir entre las afinaciones más acertadas, la que más se acerque, emplearnos en el oído lo mejor que sepamos y dar por buena esa nota.

La realidad es algo tan subjetivo, que no debería existir como concepto singular. Escribir “la realidad” debería considerarse una incorrección gramatical, “las realidades” sería mucho más acertado y realista, valga la expresión. No obstante, hay que tener cuidado, pues muy a menudo ocurre que no tenemos demasiado tiento a la hora de afinar y terminamos disfrazando de realidades lo primero que nos encontramos. Ya sea por falta de paciencia, constancia, dedicación o la más común y extendida, a la par que poco recomendable, por falta de inquietudes suficientes para buscar alternativas.

Si las primeras cien explicaciones no nos convencen, seguramente vayamos bien encaminados, puede que terminemos encontrando al menos un sucedáneo de realidad y con un poco de suerte, la nota menos desafinada. Si nos gusta la primera respuesta que nos ofrezcan y nos quedamos ahí, mal vamos, pues no solo estaremos pecando de conformismo, también de falta de capacidad crítica. Ante estas posibilidades, lo que mejor puede ayudarnos es la única ambición que me parece honorable, la ambición de aprendizaje y el afán por saber utilizar lo que aprendemos.

Así que, por aquello de que hay cosas que solo son lo que parecen cuando no parecen lo que son, lo mejor es no hacerme mucho caso y seguir buscando en el cajón desastre de nuestras vivencias, porque existe la más que evidente posibilidad de que me equivoque. ¿Quién sabe? A lo mejor todo esto no es más que otra de mis chorradas y yo mismo no haya explorado lo suficiente.
Puede que solo esté divagando y en realidad sea más acertado acomodarnos con lo que nos cuente el primero que nos convenza, liarse la manta a la cabeza (no vaya a ser que nos tiren del sofá) y terminar aceptando bendita ignorancia.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pase por tu rincon de escritura donde dejas las sombras de tinta sobre la mesa, donde no recuerdas que hicistes son la nota que escribistes la semana pasada, pase para decirte que me gusta lo que escribes, y aunque a veces me he hecho un lio, acepto mi bendita ignorancia. Pienso que será un buen libro. Adelante y Muchisima Suerte.

Silvia Bread&Water